Los peligros de volar demasiado bajo
Al sur de la isla griega de Samos se encuentra el mar Icario.
Cuenta la leyenda que es ahí donde murió Ícaro, víctima de su prepotencia y orgullo desmedido.
Lo que podemos sacar como conclusión de esta leyenda es que no te creas que eres mejor de lo que eres y que no intentes pensar en grande.
Vale.
(Si no conoces la leyenda te recomiendo que la leas, puedes buscar en internet: «El mito de Dédalo e Ícaro»)
Pero hay un detalle importante.
Lo que no cuentan del mito es que, además de que Dédalo le recuerda a su hijo que no vuele demasiado alto, también le recuerda que es igual de peligroso volar demasiado bajo.
La sociedad ha olvidado completamente la parte sobre volar bajo, y ha creado una cultura en la que todos nos recordamos constantemente los peligros de destacar y de ir contracorriente.
Pero se ha ignorado algo que a mi parecer, es muy importante y común: conformarse con demasiado poco.
Es mucho más peligroso volar demasiado bajo que demasiado alto.
Porque crees que es más «seguro» volar bajo.
Muchas veces nos conformamos con expectativas modestas y sueños a medias, y nos prometemos menos de lo que somos capaces.
Al volar demasiado bajo, somos injustos no sólo con nosotros mismos, sino con aquellos que se podrían beneficiar de nuestro trabajo.
El otro día hablaba con un amigo clarinetista sobre el presente y el futuro (incierto) que nos espera.
Me contaba que en la orquesta donde trabaja, ya han anunciado que hasta el 2021 que se olviden de tocar en público.
Comentábamos como en tiempos de crisis, la creatividad juega un papel fundamental y a nosotros los músicos, nos puede ayudar para buscar nuevas formas de expresarnos y llegar a nuestro público.
Porque el público sigue ahí. Está esperando a que le ofrezcamos nuestro trabajo.
Nadie dice que vaya a ser fácil.
Pero quizás tenemos que empezar a pensar en esas formas de hacerlo llegar.
Hemos construido un mundo en el que es posible volar más alto que nunca, y a pesar de ello, nos han hecho creer que debemos seguir volando bajo.
Y mientras, aquí estamos.
Esperando a que todo pase.
Igual es momento de dejar de esperar a que nos den permiso.
Y empezar a hacer algo.
PD: te dejo un artículo interesante relacionado.
Si en 17 minutos pudiera mostrarte cómo mejorar la velocidad (y calidad) de tu articulación en los próximos 30 días o menos… ¿te interesaría saber cómo?
Regístrate aquí y Accede Ahora a esta Clase Gratuita para descubrir cómo mejorar tu articulación
Deja una respuesta